El día que el SEO conoció a la IA

Había una vez un experto SEO que se pasaba los días midiendo palabras clave, afinando títulos y peleando con los algoritmos de Google.
Cada vez que pensaba que lo tenía dominado, aparecía un nuevo cambio, una actualización o —peor aún— una inteligencia artificial que respondía sin mostrar enlaces.

“¡Se acabó el SEO!”, gritaban en los foros.
“Las IAs se quedarán con todo”, murmuraban los marketers tomando su tercer café del día.

Hasta que, una mañana, en el grupo de Slack de su agencia, alguien escribió:

“¿Habéis probado IA SEO Generator?”

El SEO, curioso y medio incrédulo, lo instaló en su WordPress.
Y ahí comenzó la magia. 🌟

En cuestión de segundos, el plugin generó cinco archivos mágicos:

• llms.txt para hablar el idioma de ChatGPT,

• humans.txt para presentarse con educación,

• metadata.json para que las IAs comprendan su contenido,

• sitemap-ia.xml para guiar a los bots inteligentes,

• y ai-plugin.json para conectar directamente con los asistentes de IA.

Cuando revisó su consola, algo había cambiado.
Perplexity empezaba a citar su web.
Gemini comprendía su contenido con precisión quirúrgica.
Y hasta Copilot le estaba mostrando en sus respuestas.

El SEO no se lo podía creer.
Sus métricas subían. Su marca volvía a ser visible.
Y lo mejor de todo: no había tocado ni una sola metaetiqueta manualmente.

Esa noche, el SEO sonrió, cerró su portátil y pensó:

“Parece un cuento, ¿verdad? Pues es real y demostrable.”